“Pasando senderos cortados a pico en abruptos
y escarpados derrumbaderos, dimos vista al
valle de Tejeda. El espectáculo es imponente.
Todas aquellas negras murallas de la gran
caldera, con sus crestas, que parecen
almenadas, con sus roques enhiestos, ofrecen
el espectáculo de una visión dantesca. No otra
cosa pueden ser las calderas del infierno, que
visitó el florentino. Es una tremenda conmoción
de las entrañas de la tierra; parece todo ello una
tempestad petrificada, pero una tempestad... 更多