La Segunda Guerra Mundial (1939-1945) fue uno de los acontecimientos fundamentales de la historia contemporánea tanto por sus consecuencias como por su alcance universal. Las «potencias del Eje» (los regímenes fascistas de Alemania e Italia, a los que se unió el militarista Imperio japonés) se enfrentaron en un principio a los países democráticos «aliados» (Francia e Inglaterra), a los que se sumaron tras la neutralidad inicial los Estados Unidos y, pese a las divergencias ideológicas, la Unión